A fin de seguir profundizando en la comprensión de qué es la EFT detengámonos un momento en el concepto de energía que esta técnica promueve. Es importante destacar que lo que se diga aquí de energía se sitúa dentro de concepciones de la física cuántica.
Según la Real Academia Española la energía es eficacia, poder, virtud para obrar. La energía pertenece al campo de lo no visible, de lo no tangible, no la puedes ver, pero sabes que está ahí porque puedes observar y/o percibir sus efectos.
La fórmula del Nobel de Física Albert Einstein E=mc², ha demostrado que todo es energía. Materia y energía son formas distintas de la misma cosa. Toda materia, incluyendo nuestro cuerpo físico, a nivel de partículas atómicas y subatómicas, está constituida por campos de energía en pulsación, vibrando continuamente, es decir en estado de potencial o posibilidad, así lo plantea la física cuántica.
Lo que no es materia desde el punto de vista energético está en estado de potencial o posibilidad. Por ejemplo, si desde la energía materializas un pensamiento limitante, es decir piensas todo el tiempo en él, puedes volver a transformarlo en energía con el solo acto de no pensarlo más, lo que equivale a decir que dejará de existir en tu vida. La energía se transforma en materia y la materia se puede transformar en energía. Las diferentes manifestaciones de nuestra vida dependerán de la frecuencia vibratoria en la que nos encontremos. Si vibramos en una frecuencia baja, como, por ejemplo, al encontrarnos en un estado depresivo, de ese potencial o posibilidad, manifestamos o materializamos pensamientos, emociones y acciones pertenecientes a esa frecuencia vibratoria. En otras palabras, los seres humanos disponemos de energía potencial tanto para crear como para dejar de hacerlo, por ejemplo, podemos generar un pensamiento, manifestar una emoción, o una acción, pero también podemos no generarlos o dejar de generarlo por la simple razón de que no estamos condicionamos a lo que somos en nuestro presente. Según sean nuestros pensamientos, emociones y acciones. vibraremos en una frecuencia determinada, la cual conlleva una información específica que condiciona nuestro estado de ser.
Cierto es que no sabemos cómo funcionan exactamente las energías, pero sí sabemos que están aquí formando la base de la realidad física. Nos conforman a nosotros y a todo lo que nos rodea.
La diferencia entre lo físico y lo sutil es análogo a lo medible vs lo no medible, lo visible vs lo invisible. Por ejemplo: el viento es no visible, pero genera que los árboles se muevan, aunque con nuestro ojo humano no lo podamos ver tiene efectos sobre la materia, al igual que la energía.
En EFT, la energía se concibe como aquello que da vida y movimiento a nuestra psiquis y cuerpo, es la base que conforma el ser humano que somos y lo que se pretende aquí es conseguir un fluir armonioso de ella. Recuerda, a mayor fluidez menor condensación. Si tu energía circula sin obstáculos, tu vida circula sin obstáculos. La materia que somos en tanto cuerpo y el entorno en el que nos desarrollamos son nada más ni nada menos que la manifestación de nuestro estado energético. Si quieres cambiar o mejorar tu vida tienes que cambiar tu energía.
Los científicos modernos, que se basan en la física o mecánica quántica, están aportando otra manera de definir y trabajar con la energía. Actualmente se está constatando lo que las medicinas orientales, los místicos y terapeutas energéticos vienen observado, intuyendo e instrumentalizado y es que por el organismo humano (cuerpo/mente) fluyen infinitas formas de energía y que todo, absolutamente todo, es energía en diferentes manifestaciones. Tu mente subjetiva tiene un efecto sobre tu mundo objetivo. En la física quántica, el efecto observador afirma que allí donde pones la atención pones la energía. Por lo tanto, afectas al mundo material que observas, tanto voluntariamente como involuntariamente porque tú como persona eres un ente energético que emite frecuencias vibratorias diferentes y que deja una impronta única e irrepetible seas consciente de ello o no.
¿Qué utilidad nos brinda comprender lo antes dicho? Si donde pones tu atención pones tu energía, aquello en lo que te enfocas es aquello en lo que te conviertes, y aquello en lo que no te enfocas es aquello en lo que no te conviertes. La energía es la materia prima de cualquier creación. Si tu atiendes y te enfocas en pensamientos limitantes creas un estado de ser limitante y si constantemente detienes tu atención en ellos manifiestas una realidad y unas circunstancias limitantes resonantes a dicho estado. Ahora, si tú no te enfocas en pensamientos limitantes, las limitaciones empezarán a desaparecer de tu vida porque tú no pones tu atención en ellos.
No puedes evitar crear porque es parte de tu naturaleza humana, pertenece a tus capacidades innatas, lo que sí puedes evitar es no crear lo que no quieres, pero para ello tienes que enfocarte en lo que sí quieres.
Esto a veces es un poco complicado porque la mayoría de las personas nos enfocamos en lo que no queremos y en lo que creemos que no vamos a lograr. Recuerda, donde pones tu atención pones tu energía, es decir tu creación.
También es una realidad que muchas personas atraviesan situaciones traumáticas y muy dolorosas como distintos tipos de accidentes, de pérdidas, lesiones físicas y mentales, etc., y con toda razón pueden decir: yo no quise crear esto, y tienen todo el derecho de sentirlo así. Lo que puedo decir aquí es que muchos acontecimientos no dependen de nosotros en tanto creadores conscientes, pero cuanto más conscientes seamos de nuestra capacidad creativa y cuanto más la estimulemos mayores herramientas de protección tendremos en nuestra vida.
Si ponemos la atención en la forma física o materia, nos regiremos por las leyes físicas convencionales o newtoniana, las cuales se centran en lo medible, observable y predecible. a materia es energía condensada que puede volver a ser energía y circular. Por ejemplo, esta física acepta al cerebro humano por ser un órgano medible, observable y predecible, pero pone en duda la existencia de la mente subconsciente, ya que esta carece de espacio físico, no es observable, no se puede medir ni mucho menos predecir. Ahora, si ponemos la atención en la energía, nos regiremos por las leyes de energía (física quántica) y podremos hacer cosas que desafían a la física convencional.
Un ejemplo de ello son las remisiones espontáneas de tumores terminales.
En síntesis, un pensamiento, una emoción, un sentimiento, una sensación, una acción son energía condensada, es decir la energía toma una forma. La clave está en comprender que los pensamientos, las emociones, los sentimientos y las sensaciones no son ni buenas ni malas, son información. Lo disfuncional, por ejemplo, no se encuentra en sentir enojo o miedo, sino en su período refractario, es decir en cuánto tiempo vas a sentir esa emoción, puede durar un instante, una hora o treinta años. De ello dependerá el estado energético porque lo que no circula queda condensadomaterializado en el cuerpo y es ahí cuando nos sentimos bloqueados, sin ganas, sin una idea de cambio, desarrollando en algunos casos sintomatologías y/o enfermedades.
Aceptar y observar lo que nos sucede es el paso inicial para liberarnos de lo que no es funcional en nuestra vida.
Los seres humanos tenemos un pasado, un presente y un posible futuro. Muchos de nosotros tenemos experiencias vividas, experiencias actuales que estamos viviendo y posibles experiencias futuras por vivir muy dolorosas y en muchas circunstancias imposibles o casi imposibles de sanar.
No es mi intención sobreestimar la realidad de ninguna persona y espero que así sea. Mi único objetivo es brindar un aporte más al bienestar humano desde mi camino recorrido y mi continua formación en el área de la salud mental y corporal. Cuanta más información y conocimiento adquiramos, accederemos a más recursos para generar cambios favorables en nuestra vida. Aprender a elevar y mantener fuerte nuestro campo electromagnético, el cual está compuesto de nuestros pensamientos y emociones, es el mejor antídoto para nuestra mente-cuerpo.
